Una de las claves para el éxito: saber cómo mejorar la autoestima
Nosotros mismos somos los que más nos exigimos, nos juzgamos, nos castigamos y solo a veces sabemos perdonarnos. Aunque parezca una paradoja, a veces no nos conocemos lo suficiente, y creamos percepciones negativas sobre nosotros mismos que pueden limitar nuestro día a día.
Hablamos de la autoestima, claro. Estas percepciones pueden afectar a diferentes aspectos de una persona y sus acciones, aunque no tienen por qué ser iguales en todas ellas. Por ejemplo, tu baja autoestima se puede focalizar en la persona, en el trabajo o en la apariencia personal.
Cuando una persona se centra en sus percepciones negativas sobre sí misma deja de lado sus fortalezas personales. En una balanza, cuando una persona tiene una autoestima baja, tiende a dejar que pese más lo malo sobre lo bueno, y eso puede conllevar problemas en la sociedad o en el trabajo, por ejemplo.
¿Cómo aumentar la autoestima?
En la baja autoestima afectan la seguridad personal, el miedo a hacer algo mal o a equivocarse de nuevo. Una persona que necesita conocer cómo trabajar la autoestima lo hace para ganar esa seguridad que le recuerde esto cada mañana: “tú puedes”.
Podemos pensar que la baja autoestima proviene de comentarios del entorno, las actitudes de las personas con las que nos rodeamos o las críticas recibimos. Sin embargo, lo que verdaderamente afecta es cómo una persona percibe ese entorno y comentarios, y cómo lo canaliza en su interior.
Cuando estás preparado para canalizarlo de forma positiva, por ejemplo, aceptando las críticas como una manera de seguir creciendo personal y profesionalmente, no tiene por qué afectar a tu autoestima. Si no lo puedes canalizar y lo tomas como un ataque, sí tendrá consecuencias sobre cómo te sientes.
Si quieres actuar con seguridad y aportar también esa confianza a las personas que te rodean existen algunas técnicas que pueden ser de gran ayuda. Vamos a ver cómo aumentar tu autoestima.
- Identifica tus fortalezas, porque, aunque haya momentos en los que pienses que no las tienes, están ahí, solo tienes que buscarlas. Piensa en cinco logros que hayas sumado en tu vida personal, laboral o educativa. Dedica ese tiempo a recordarte cómo te has superado en esas ocasiones. Piensa en las características que se necesitan para haber conseguido esos logros. Esas son tus fortalezas.
- Busca valores y no objetivos. No es lo mismo seguir el valor del esfuerzo que conseguir llegar a una cima imposible de una montaña. Cuando conviertes tus objetivos en valores te reconfortas aun y cuando no has llegado a la cima. Has hecho todo el esfuerzo que estaba en tu mano, has cumplido tus valores.
- Convierte tus pensamientos negativos en respuestas racionales. Habitualmente interpretamos las situaciones de forma subjetiva y tiende a resultar en un pensamiento negativo. Intenta valorar la situación y piensa de forma racional. Piensas que te critican el trabajo por tu persona, pero en realidad lo que están intentando hacer es corregirte para potenciar tu valía.
- Supera los miedos. No bloquees tus pensamientos cuando estos te producen miedo ante una situación. Acepta ese miedo, deja que tenga espacio en tu mente y familiarízate con él. Aprender a vivir con el miedo es el primer paso para deshacerse de él.
- Perdónate. Como hemos dicho al principio nosotros somos nuestros peores enemigos, jueces y críticos. Practica la autocompasión. ¿Qué es esto? Tratarte a ti mismo con la empatía con la que tratarías a otra persona en tu situación. Intentas reconfortar a tus compañeros o amigos cuando estos tienen un bajón, o han cometido algún error o no han salido las cosas como les gustaría. Hazlo contigo de la misma forma.
A medida que sumamos experiencias la autoestima va evolucionando. Desde niños vamos creando la forma en la que nos miramos y nos queremos, y desarrollamos una confianza mayor o menor. En la edad adulta nos enfrentamos a situaciones que pueden dañarla, por eso es importante conocer cómo mejorar la autoestima.
Las crisis personales nos hacen pensar que no podemos seguir adelante, que no somos capaces de hacer algo en concreto porque no somos lo suficientemente buenos, por ejemplo. Esto hace que nos sintamos desmotivados y no prestemos atención o incluso dejemos de lado nuestros quehaceres y el cuidado personal.
Cuando esto ocurre, entramos en una espiral de la que es conveniente salir lo antes posible. El no hacer algo por no tener la autoestima alta nos hace bajar todavía más los niveles de esta. Es importante, por lo tanto, saber cómo mejorar la autoestima en los momentos en los que pasamos por una crisis personal para no dejar que esa espiral siga creciendo.
Cómo trabajarla en el entorno laboral para lograr el éxito
La falta de confianza en nosotros mismos afecta directamente a nuestro desempeño laboral. Aunque tengamos una autoestima baja en otros aspectos que no tienen nada que ver con el trabajo, es el lugar donde habitualmente pasamos más tiempo, nos enfrentamos a más dificultades y es más susceptible que nos dejemos llevar por los pensamientos negativos.
Cuando no sabemos cómo trabajar la autoestima y la tenemos baja, funcionamos de forma más lenta en el entorno laboral y nos hace tener una imagen más debilitada frente al equipo. Tendemos además a dedicar más energía a revisar todo lo que hacemos antes de dejar que otros ojos lo revisen, por lo que nuestra productividad disminuye. Cuanto más baja tenemos la autoestima, peor aceptamos las críticas y creamos peores pensamientos que nos hacen entrar en un bucle cada vez más profundo.
Para crear un clima de seguridad y confianza en el mundo laboral basta con observar el entorno y cambiar la forma en la que actuamos en él. Estos son algunos de los hábitos que explican cómo trabajar la autoestima para mejorarla.
- Valorar el trabajo. Tendemos en los entornos laborales a destacar los errores frente a los logros, y eso es un error. Felicitar por un buen trabajo, sin necesidad de que este sea excepcional, fortalece la autoestima de los trabajadores, de los compañeros.
- Potenciar la colaboración. La competitividad y el estar continuamente comparándose con el resto debilita la confianza en uno mismo. A la hora de conocer cómo trabajar la autoestima es importante asegurarse de que el trabajo en equipo no se ha convertido en una competición entre sus integrantes.
- Creer en las capacidades de los compañeros. Es fundamental para eliminar el miedo a cometer errores. Contar con el apoyo de los compañeros y sentir que confían en ti te impulsará a ser más creativo y tener más iniciativa y autonomía.
- Orgullo de pertenencia. La satisfacción de estar rodeado de gente muy capaz de hacer las cosas bien, de ser parte de un buen equipo aumenta también la confianza en uno mismo. Debemos mirar a los compañeros desde las gafas de la admiración y el respeto.
En saber cómo subir la autoestima se encuentra tanto el éxito personal como el de equipo. Cuando todas las personas tienen la suficiente confianza en sí mismas y en los compañeros para proponer, asumir tareas y reforzar el trabajo, se lograrán más éxitos.